Terapia Cráneo-Sacral
Es un enfoque terapéutico suave no invasivo que se centra en liberar restricciones y mejorar el flujo del líquido cefalorraquídeo que rodea el cerebro y la médula espinal. Se basa en la idea de que este sistema puede influir en la salud física y emocional al liberar tensiones y promover el equilibrio del cuerpo. Utiliza toques muy suaves para ayudar al cuerpo a autorregularse y sanar.
Sistema craneosacral
La terapia craneosacral se basa en la idea de que el sistema craneosacral es un sistema de autocuración que está constantemente en movimiento. Este movimiento, conocido como ritmo craneosacral, es un movimiento rítmico y fluido que se puede sentir en todo el cuerpo. Los terapeutas craneosacrales utilizan sus manos para sentir este movimiento y, luego, utilizan un toque ligero para ayudar a restaurar el equilibrio y la armonía al sistema craneosacral.
La terapia craneosacral se utiliza para tratar una variedad de condiciones, incluidas:
Dolor de cabeza, migrañas y dolor facial
Tensión muscular, dolor de cuello y dolor de espalda
Trastornos del sueño, ansiedad y depresión
Trastornos digestivos y problemas de vejiga
Trastornos neurológicos, como el autismo y la parálisis cerebral
Lesiones traumáticas, como accidentes automovilísticos y deportes
La terapia craneosacral es una terapia segura y eficaz que puede ayudar a mejorar la salud y el bienestar general.
Algunos de los beneficios potenciales de la terapia craneosacral incluyen:
Reducción del dolor y la inflamación
Mejora de la movilidad y la flexibilidad
Aumento de la energía y la vitalidad
Mejora del sueño y el estado de ánimo
Reducción del estrés y la ansiedad
Mejora de la función cognitiva y el aprendizaje
La duración típica de una sesión de terapia craneosacral es de 45 minutos a 60 minutos. Sin embargo, la duración puede variar según las necesidades del paciente y la condición que se esté tratando. Por ejemplo, las sesiones para tratar lesiones agudas pueden ser más cortas, mientras que las sesiones para tratar condiciones crónicas pueden ser más largas.
Durante una sesión de terapia craneosacral, el paciente se tumba boca arriba en una camilla. El terapeuta craneosacral utiliza sus manos para sentir el ritmo craneosacral del paciente. Luego, el terapeuta utiliza un toque ligero y delicado para ayudar a liberar las tensiones y los bloqueos en el sistema craneosacral.
Después de la sesión, el paciente puede experimentar una sensación de relajación y bienestar. También es posible que experimente algunos efectos secundarios leves, como fatiga o dolor muscular. Estos efectos secundarios suelen ser temporales y desaparecen por sí solos.